Literatura

El testamento de Guillermo Rosales

La traducción al inglés de su novela 'Boarding Home' fue presentada este jueves en la librería Idlewild Books, de Nueva York.


Con el título The Halfway House, se presentó en la librería Idlewild Books, de Nueva York, la traducción al inglés de la novela Boarding Home, del fallecido escritor cubano Guillermo Rosales.

Esta novela fue premiada en el concurso Letras de Oro, en 1987, en Miami. Ese mismo año, la editorial Salvat la publicó, recibiendo un amplio apoyo de la crítica, lo que valió que en 2003 la editorial española Siruela hiciera una segunda edición, que tituló "La casa de los náufragos". Pero el novelista no llegaría a verla.

Guillermo Rosales se suicidó en 1993, en el mismo home de los olvidados que describe a gritos en su novela: "La casa decía por fuera 'Boarding home', pero yo sabía que sería mi tumba. Era uno de esos refugios marginales a donde va la gente desahuciada por la vida. Locos en su mayoría. Aunque, a veces, hay también viejos dejados por sus familias para que mueran de soledad y no jodan la vida de los triunfadores".

Para muchos, Rosales era un loco. Para otros, un genio. Pedro Juan Gutiérrez, autor de Trilogía sucia de La Habana, opina que "The Halfway House es una de las mejores novelas latinoamericanas de todos los tiempos".

Según Gutiérrez, "nunca antes nadie se atrevió a escribir los otros aspectos de la realidad de Miami. Rosales no era sólo un escritor extraordinario, sino un hombre valiente".

Para algunos cubanos —los que ven en la revolución el totí al que echamos la culpa de todo—, en menos de 15 años, Reinaldo Arenas se suicidó, Guillermo Rosales se pegó un tiro, Ángel Escobar se tiró de lo alto de un edificio, Miguel Collazo se clavó en el corazón una aguja de coser colchones y Raúl Hernández Novás se dio un disparo.

Ni unos ni otros. Rosales no era un inadaptado político más. "He estado ingresado en más de tres salas de locos desde que estoy aquí, en la ciudad de Miami, a donde llegué hace seis meses huyendo de la cultura, la música, la literatura, la televisión, los eventos deportivos, la historia y la filosofía de la isla de Cuba. No soy un exiliado político. Soy un exiliado total. A veces pienso que si hubiera nacido en Brasil, España, Venezuela o Escandinavia, hubiera salido huyendo también de sus calles", leemos en The Halfway House.

"Creo que la experiencia de quien vivió en el comunismo y el capitalismo y no encontró valores sustanciales en ninguna de ambas sociedades, merece ser expuesta. Mi mensaje ha de ser pesimista, porque lo que veo y vi siempre a mi alrededor no da para más. No creo en Dios. No creo en el Hombre. No creo en ideologías", admitió el propio Rosales en una ocasión.

En el epílogo de la primera edición en español (por desgracia, eliminado de la edición en inglés), Ivette Leyva Martínez escribió que "pocos escritores cubanos encarnan, como Guillermo Rosales, el paradigma de la frustración, el fulgor del genio, el tormento de la insatisfacción y la locura. Murió a los 47 años, pobre, solo y olvidado".

En una entrevista publicada en la revista Encuentro de la Cultura Cubana, el novelista Carlos Victoria, cercano a Rosales en los últimos años de su vida, recordaba que éste "estaba alimentado por el odio, era su principal motor. Un odio contra la naturaleza humana. No perdonaba a nadie, ningún defecto, ninguna debilidad, empezando con él mismo".

Leyma Rosales dijo a CUBAENCUENTRO.com que su hermano "fue como un cometa con un brillo genial, pero efímero, pero sin duda un inadaptado social". En tanto, Lucía Corona, quien fuera pareja del escritor, reveló que Rosales había intentado suicidarse varias veces en La Habana. "Cojo una pistola imaginaria y me la llevo a la sien. Disparo", escribió en la novela.

La mañana del martes 6 de julio de 1993, el novelista se pegó el tiro anunciado. El Fígaro Literario escribiría: "Enfrentado a la imposibilidad del mundo, Guillermo Rosales nos ha dejado este doloroso, violento y lírico testamento".

The Halfway House, la traducción al inglés de Anna Kushner, está a la venta en todas las librerías de Estados Unidos. También está disponible en español, con el título original, Boarding Home.

© cubaencuentro

4 Comentarios


4 by A.B. (Usuario no autenticado) 23/05/2009 1:00

Excelente, por cierto, el prólogo de José Manuel Prieto. Lo mencionan muy elogiosamente todas las reseñs de la novela que estan saliendo en inglés.

3 by Juan el Globero (Usuario no autenticado) 22/05/2009 15:40

Hay algunas precisiones que hacer a este articulo. Fue el éxito de la edicion francesa de la novela ("Mon ange") traducida por Liliane Hasson y publicada en Paris por la prestigiosa editorial Actes Sud lo que hizo que se publicara en Espana. Muchas veces ha ocurrido asi en nuestra literatura. Reinaldo Arenas es un ejemplo de ello.Espana no toma riesgos y cuando Francia lo hace alla van ellos corriendo... Es contradictorio porque el articulista menciona lo que dice "Le Figaro", pero silencia lo de la edicion gala. Ay, nuestros criticos siempre tan incompletos incluso ahora que existe GOOGLE y otras etceteras que facilitan las perezas!!!!!

2 by Javier Campos (Usuario no autenticado) 22/05/2009 15:40

Cuando yo obtuve el Premio Letras de Oro en 1990, en el género de poesiía, y fuimos a Miami a recibir el premio de manos del reciente Nobel Camilo José Cela, Rosales estaba alli y fue la única vez que lo vi. Pero leí su novela inmdiatamente y siempre me impactó. Y conservó esa primera edicion de "Letras de Oro" totalmente agotada. Desde entonces, desde 1992, he enseñado esa novel en mis cursos de literatura en EEUU. Creo que quizás fui el primero en enseñarla en cursos aqui EEUU. Qué bueno que está en inglés ahora.

1 by Alina Brouwer (Usuario no autenticado) 22/05/2009 15:40

Muchas gracias por esta nota. Alina Brouwer.

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