La providencia del pianista Danilo Pérez

El compositor y pianista Danilo Pérez (Panamá, 1966) es una referencia obligada del jazz contemporáneo. Dicen que su padre —cantante y líder de una orquesta panameña de música bailable— lo sentó frente al piano a los tres años para que aprendiera el repertorio clásico de la pianística europea. Cuando Danilo tenía 10 años ya estaba totalmente familiarizado con elementos armónicos básicos de Mozart, Liszt, Chopin, Mendelssohn, Brahms, Rajmáninov y Debussy. Más tarde completa sus estudios en el prestigioso Berklee College of Music: todavía colegial toca con Jon Hendricks, Terence Blanchard, Claudio Roditi y Paquito D’Rivera. Colaborador de grandes figuras del jazz: Jack DeJohnette, Charlie Haden, Michael Brecker, Joe Lovano, Tito Puente, Wynton Marsalis, John Patitucci, Gary Burton, Wayne Shorter, Steve Lacy… El trompetista cubano, el ex irakere Arturo Sandoval, lo convoca como pianista de Danzón (Grammy, 1994).

El más joven integrante de la Orquesta de las Naciones Unidas, dirigida por el trompeta Dizzy Gilliespie, con quien aprendió los secretos armónicos del be bop, el post bop y cubop. Con el saxofonista Wayne Shorter (Alegría, Footprints Live) entra a los recodos del hard bop y el free. Ha incursionado en las coordenadas del latin jazz, jazz afrocubano, tradicional panameña y lo clásico con íntegras articulaciones. PanaMonk —una placa que grabó en 1996 para el sello Impulse! / GRP Records— fue calificada por el New York Times “obra maestra del jazz contemporáneo”: la revista Dowbeat la incluye en la lista de los 50 discos de jazz piano más relevantes de todos los tiempos.

Aparece Providencia (Mack Avenue Records, 2010), producción que encomia lo clásico, el free, el hard, lo afrocubano y el folclor sudamericano desde solvencia distinguida. Somos testigo de un ejecutante que aborda reminiscencias jarrettianas y hancockianas en consumado discurso de fusiones folclóricas latinas con armonías del be bop y el hard. Acompañado de bajo (Ben Street), batería (Adam Cruz), percusiones (Jamey Haddad), congas (Ernesto Díaz), sax alto (Rudresh Mahanthappa), flauta (Matt Marvuglio), oboe (Barbara Laffitte), corno francés (Amparo Edo Biol), fagot (Margaret Phillips), clarinete (Benito Meza) y voz (Sara Serpa), el pianista panameño logra una atmósfera que transita por lo cool, hace pausa en lo folclórico, coquetea con el hard/free y se arropa en lo neoclásico (abierto homenaje al John Lewis de The Modern Jazz Quartet). Ojo con los solos de Mahanthappa, sax alto que gana cada vez más prestigio en las plazas del jazz. La vocalista portuguesa Sara Serpa arroja apacibles inflexiones en “Providencia” —tema que da título al CD— en una suerte de fado caribeño que percusiones y piano matizan en ángulos de mambo afrocubano.

El ineludible bolero panameño “Historia de un amor” (Eleta Almaran) alcanza aquí momentos inolvidables. Providencia —a pesar de algunos titubeos en la mudanza estilística del músico panameño: no se escucha proporcionado en las consonancias de los asomos free—, abre nuevos derroteros en las propuestas contemporáneas del jazz latino.

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