Sindicato cubano condiciona el aumento de los salarios a la reforma laboral y la eliminación de subsidios

“Hasta que el país, con las medidas que se adoptan, no logre desinflar plantillas, eliminar gratuidades y subsidios indebidos (…), no estará en condiciones de hacer incrementos salariales cambiando la actual escala”, afirma lider sindical

Agencias

Salvador Valdés, secretario general de la Central de Trabajadores de la Isla (CTC, sindicato único), ha dicho que Cuba no podrá afrontar aumentos salariales hasta cumplir con el reajuste laboral emprendido en el país y eliminar subsidios innecesarios para elevar la productividad.

En una entrevista que publica hoy el diario Trabajadores, el líder sindical ha destacado la necesidad de revitalizar el principio de distribución socialista mediante “sistemas de pago por resultados del trabajo” así como aumentar la productividad y la eficiencia para que se refleje en el ingreso de los trabajadores.

“Hasta que el país, con las medidas que se adoptan, no logre desinflar plantillas, eliminar gratuidades y subsidios indebidos que conspiran contra la elevación de la productividad del trabajo, no estará en condiciones de hacer incrementos salariales cambiando la actual escala”, afirmó.

De acuerdo a un reporte de Efe, el salario medio en la Isla se sitúa en unos 450 pesos cubanos al mes (el equivalente a unos 18 dólares), aunque las autoridades cubanas matizan este dato con el argumento de que servicios básicos como la salud o la educación son gratuitos y que otros muchos tienen precios subsidiados.

El plan de reformas económicas emprendido por el presidente Raúl Castro para “actualizar” el modelo socialista, incluye una drástica reducción de las infladas plantillas estatales, donde se suprimirán medio millón de empleos públicos de forma progresiva hasta el año 2015.

Esta “reordenación laboral”, señala la agencia, ha sido “la situación más difícil” a la que se ha enfrentado el movimiento sindical cubano durante los 53 años de revolución, según admiten dirigentes de la CTC.

El propio Salvador Valdés Mesa, reconoce la complejidad de esa tarea en la citada entrevista, donde destaca que es “imprescindible desinflar plantillas para lograr eficiencia”.