Héctor Palacios

Héctor Palacios, miembro de los 75, llega a Madrid para un tratamiento médico

La Habana autorizó la salida del disidente tras gestiones del gobierno español.


Las autoridades cubanas autorizaron la salida de la Isla de Héctor Palacios, uno de los 75 disidentes encarcelados en 2003, y de su esposa Gisela Delgado, directora del Proyecto de Bibliotecas Independientes, quienes llegaron a Madrid este viernes por la mañana tras gestiones del gobierno español ante La Habana, informó EFE.

Palacios fue condenado a 25 años de prisión durante los juicios sumarísimos de abril de 2003, y excarcelado en diciembre de 2006 con una licencia extrapenal debido a su delicado estado de salud.

El gobierno español le invitó a recibir tratamiento médico en España el pasado marzo, explicó este jueves en la Isla el propio Palacios, un sociólogo de 66 años que sufre graves problemas cardiovasculares, respiratorios e isquemias transitorias.

"Fueron conversaciones entre el gobierno español y el cubano, nunca hemos presentado una carta (a las autoridades cubanas) para emigrar porque no nos vamos del país, aquí nacimos, y no tengo por qué irme a vivir a otro país", dijo en declaraciones en La Habana a un reducido grupo de periodistas españoles, según EFE.

Palacios y Delgado viajaron a Madrid con un visado temporal por tres meses para que el opositor reciba atención médica. Luego deben regresar a Cuba, donde se queda su hija, de 22 años.

"Le agradezco al gobierno de España que me lleve allá y me cure, pero le critico que no haya resuelto el tema de los derechos humanos" en Cuba, dijo Palacios, quien reclamó la excarcelación de los presos políticos y afirmó que al menos 32 de los miembros del Grupo de los 75 que siguen en prisión sufren graves problemas de salud.

Para Gisela Delgado, una de las fundadoras de las Damas de Blanco, que agrupa a mujeres familiares de presos políticos cubanos, el permiso de salida de las autoridades cubanas "ha sido una sorpresa".

"No habíamos visto ninguna señal", dijo."Esperemos que sea una puerta para que se inicie la atención a los presos enfermos y se avance en la excarcelación de los presos políticos", agregó Delgado.

La disidente aseguró que ella y Palacios regresarán a Cuba "por la responsabilidad de luchar" por la patria y "el compromiso con los que se quedan en prisión".

De los 75 disidentes condenados en la primavera de 2003 continúan en las cárceles 59. De los restantes 16, excarcelados con licencias extrapenales por motivos de salud, cuatro partieron al exilio y uno, Miguel Tamayo Valdés, falleció en enero pasado en La Habana a causa de sus padecimientos.

El poeta y periodista Raúl Rivero, quien reside en España, fue el primero de los 75 en conseguir permiso del gobierno cubano para abandonar el país junto a su esposa, Blanca Reyes, en abril de 2005.

Dos meses después, el periodista independiente Manuel Vázquez Portal abandonó la Isla con su esposa, Yolanda Huerga, y su hijo Gabriel, para instalarse en Estados Unidos.

Los otros dos exiliados son Osvaldo Alfonso, quien vive en Suecia con estatus de refugiado político, y Julio Antonio Valdés Guevara, que viajó a Estados Unidos.

En el momento de su arresto en 2003, Héctor Palacios dirigía el Centro de Estudios Sociales Independientes, formaba parte del movimiento Todos Unidos, publicaba artículos en diferentes medios de prensa en el extranjero, entre ellos ENCUENTRO EN LA RED.

© cubaencuentro

11 Comentarios


11 by Teresa Cruz (Usuario no autenticado) 31/10/2007 13:30

Mi compatriota Hector Palacios Ruiz esta en Espana para tratar de mejorar su salud quebrantada por la prision y la lucha incesante contra la tirania desde que decidio escoger ese camino sembrado de incomprension, dificultad, represion y aridez. La aridez de la incomprension de esta dificil lucha en un campo minado por el poder de la familia Castro que ha abandonado, desde el principio, la tarea de todo gobernante, mejorar la vida de sus conciudadanos y ofrecerles las opciones para vivir dignamente. Hector Palacios Ruiz ha optado por luchar por un cambio hacia la democracia. Una tarea que implica enormes sacrificios personales y un costo material y emocional enormes. Si como se dice en un comentario, vivia con prebendas, las dejo a un lado para trasladarse al terreno de esa otredad peligrosa que es en Cuba el terreno de la oposicion o la disidencia. Hector ha sufrido el ostracismo del Regimen y la represion en el alma de su hija por matrimonio, Giselle y de su madre. En la Primavera Negra de La Habana, cuando la razzia de treinta militares invadio su casa para revolver y destruir papeles, libros, revistas y un viandero vacio excepto por tres papas, en esos mismos momentos la policia politica estaba en casa de su madre de mas de ocho decadas de edad registrando, revolviendo sus limitadas pertenecias, buscando alguna evidencia que justificara la condena a Hector, que ya estaba impuesta; con un medico y un oficial ofreciendole a Maria dinero y medicinas para “ayudarla” en esta situacion. Dinero y medicinas que rechazo esta digna cubana que vive de un minimo ingreso y de los huevos que dan las gallinas que cria en el patio de su reducida casa. Y les dijo que no podia aceptar ninguna ayuda de las mismas personas que encarcelaban a su hijo por pensar de forma diferente. A su hija Giselle comenzaron a asediarla en el preuniversitario donde estudiaba,primero el director que fue a su aula para hablar de los “vendepatrias” delante del resto de sus companeros; tiempo despues se reunio con ella la maestra que Giselle mas queria para pedirle que renegara de su madre y de su padre. Giselle contesto valientemente pero el desconcierto y el dolor en su corazon ya no solo lo producia la represion sino que su maestra mas querida le pidiera que abandonara a sus padres. Hay mucho mas en el tintero sobre la represion contra esta familia; los actos de repudio frente a la casa de dos mujeres solas mientras el esposo y padre esta a kilometros de distancia en una celda minima y mas. No vi la celda de Hector pero si estuve en la entrada de esa prision en Pinar del Rio, donde se espera para pasar a la visita o para dejar la jaba; hay capas de suciedad en las mesas y olor a excremento humano, no porque los visitantes hayan abandonado sus costumbres higienicas_somos uno de los pueblos que mas persigue la limpieza en el mundo-sino porque el servicio sanitario estaba desbordado y cuando limpian-lo hicieron estando yo alli-pasan una escoba por el piso; no, arrastran una escoba por el piso y las mesas: esa es la limpieza. Imagino como seria la celda. Alli llegue con Gisela Delgado y Elsa, la esposa de Arroyo para que Hector supiera que si no podia llegar hasta su celda al menos llegaba hasta las puertas de la prision. Pase varios dias en casa de Hector, nada habia para comer y no crean que aporte mucho; todo lo que se recauda para la oposicion apenas alcanza para transportarse y desarrollar el trabajo. En el caso de los presos, apenas para llevarles alimentos. El alto costo de la vida en Cuba hace de estas tareas trabajos de Hercules. Cuando en esos dias fui a ver a Maria, la madre de Hector, la encontre preocupada pero firme, alegre por la visita; minima contribucion pues nuestro deber es estar presos con ellos, aunque aun en exilio no somos totalmente libres. Alli solo habia lo minimo para alimentarse y el carinyo de algunos vecinos fieles, el cuidado de Jose, el hermano de Hector pero no habia prebendas, esas que Hector estaria disfrutando, segun un comentario anterior, si no hubiera escogido este camino. Estuve en su casa, un mes y dias antes de su arresto del 2003, con mucha calma,con el sosiego que le es habitual, me dijo que se acercaban dias muy dificiles para la oposicion. No rehuye esa dificultad, no cesa en su empenyo y se lo llevan para las ergastulas. Hablamos hasta la madrugada, el le mando a mi esposo Tony y a Remberto Perez, unos tabacos, regalo de unos campesinos del Escambray y lleno con eso de alegria mi casa, tener en nuestras manos tabacos de Manicaragua torcidos por unos campesinos que cultivaba un metro de tierra era otra expresion de libertad. En todas las ocasiones en que hable con Hector personalmente y por telefono, su voz era firme y su cuerpo solido, a pesar de que ya sufria malestares. Hector es un hombre gentil, muy agudo, extremadamente inteligente, vacio de odios y con un gran amor a Cuba. Da gusto sentarse en la casa de Gisela y Hector, en ese sillon de su familia al que le falta un brazo, inclinarlo hacia el balcon y ver como los helechos se enredan dibujando fantasias en el aire puro de esta casa donde viven unos de los seres mas libres del mundo, esa libertad que se paga con las rejas. Ahora su voz sale entrecortada por las izquemias y la falta de oxigeno en su sangre, se le nota debil y ha aumentado de peso por la falta de ejercicio en la prision, lo que lo llevo a mas falta de oxigeno y a la imposibilidad actual de hacer minimos esfuerzos fisicos. Sufre dolores fuertes. Hector es el mismo hombre de valentia serena que inicio su lucha en esta guerra civil atipica que requiere estrategias y tacticas nada convencionales. A los soldados, en las guerras, se trata de recuperarlos fisicamente, para reintegrarlos al combate. Y esta es una guerra, por medios pacificos pero una guerra en la que los opresores si tienen las ventajas de los chuqueos medicos y la restauracion fisica. En la casa de Hector y Gisela, la unica joya que encontre fueron esos helechos enroscados en el balcon, vigilados desde el frente por miembros de las Brigadas de Respuesta Rapida. He visitado a muchos otros opositores y solo ha visto limitaciones economicas y sacrificios. La historia de la represion contra ellos no esta aun escrita y no se conoce totalmente. Ojala un dia podamos hablar todos en paz sobre estas cosas en cualquier sala de cualquier cubano y podamos enterdernos. A eso aspira esta familia, a que todos participemos. Lo demuestra en su entrevista, en la que como hombre de honor agradece las gestiones a su favor sin dejar de criticar. Una vez mas pone el interes nacional por encima del personal. Mientras tanto, ante ti Hector, ante ti, Gisela, ante su familia, yo me quito el sombrero, como dicen en Madrid. Cuidense mucho. Teresa Cruz New Jersey.

10 by Lázaro Gonzalez Valdes, ex preso de conciencia (Usuario no autenticado) 29/10/2007 17:40

Este asunto no se trata de dudas razonables ni de ataques personales, sino que los disidentes son personas y las personas cometen errores. Hay dos tipos de personas: las que se equivocan pero creen que su actuar es correcto por razones diversas que van desde ignorancia hasta la seudo creencia de ser una especie de Mesías, y las que reconocen cada error asimilándolo como experiencia para rectificar sus procedimientos. Los primeros no nos sirven de líderes ni de ejemplo ni para nada en las empresas de interés común. Héctor Palacios erró cuando Concilio Cubano en febrero de 1996 como erró el llamado grupo de los siete ó G-7. Ellos postergaron el programa de desobediencia civil en que devino Concilio Cubano, además lo hicieron de forma arbitraria, con aquella promesa de que "abrimos un compás de espera hasta que las circunstancias sean favorables". Pero no han vuelto a ser favorables las circunstancias como en aquel tiempo lo cual queda demostrado con elhecho de que nunca más se han podido organizar todas las fuerzas de la sociedad civil en Cuba. Ni Todos Unidos ni el Proyecto Varela ni el Arco Progresista ni la Alianza de los Liberales ... pero quienes dirigen estas alianzas unitarias, que dicho sea de paso no unen suficiente fuerza para la tarea liberadora, eran parte de Concilio Cubano. Palacios y los del G-7 rehuyen este tema desde 1996 y habemos activistas que creemos desde aquel tiempo que se deben debatir esos y otros problemas en público, con respeto, con razones, con evidencias y pruebas, porque ese debate opinamos que es saludable democráticamente hablando, necesario para organizarnos, para crear procedimientos que en verdad nos puedan liberar de la opresión, para recobrar la credibilidad que se ha perdido entre tanto proyecto impracticable, entre tanto discurso sin sentido, entre tanta exaltación de líderes que nada solucionan en beneficio del pueblo de Cuba oprimido. Debate, debate, debate. Quien no sea capaz de debatir sobre el bien común de forma civilizada e inteligente, de modo razonable y efectivo, no puede ser presentado como líder de los oprimidos, no debe ser aceptado como figura pública. Nuevamente convoco al debate con Héctor Palacios, con Oswaldo Payá, con Martha Beatriz Roque, con todos los que en febrero de 1996 actuaron de una u otra forma en aquellos eventos de Concilio Cubano. Algunos pedimos y estamos listos para ese debate hace más de diez años pero se rehusa el mismo con excusas increibles. Encuentro en la Red, Radio Martí, los receptores de grants de la USAID y de la NED tienen los medios para llevar a cabo este acto necesario. ¿Habrá voluntad para ello? El tiempo dará la respuesta.

9 by Armando Arango (Usuario no autenticado) 29/10/2007 7:40

Difiero totalmente de Teresa Cruz,de New Jersey, todos los opositores no son un dechado de virtúdes y honores.Es muy difícil creer que en un río tan revuelto, todas las aguas son limpias. No generalizo.Lamentablemente muchas cosa en la vida se prestan para NEGOCIO. Me consta, por contactos familiares, que muchos especulan con los dineros y privilegios que les envían desde afuera y se de diputas entre sí por razones de la distribuciónes económicas.No los menciono, con nombre propio, porque no publicarian mi nota, ya que esos nombres son sagrados aqui.Cada vez que Bush da instrucciones de apoyo para el cambio en Cuba lo hace en terminos de dinero, mas guano para radio y tele Marti y para enviar a los disidentes.En medio de carencias es lógico comprender las ansiedades que esto despierta. Armando Arango

8 by Teresa Cruz (Usuario no autenticado) 28/10/2007 21:00

Mi compatriota Hector Palacios Ruiz esta en Espana para tratar de mejorar su salud quebrantada por la prision y la lucha incesante contra la tirania desde que decidio escoger ese camino sembrado de incomprension, dificultad, represion y aridez. La aridez de la incomprension de esta dificil lucha en un campo minado por el poder de la familia Castro que ha abandonado, desde el principio, la tarea de todo gobernante, mejorar la vida de sus conciudadanos y ofrecerles las opciones para vivir dignamente. Hector Palacios Ruiz ha optado por luchar por un cambio hacia la democracia. Una tarea que implica enormes sacrificios personales y un costo material y emocional enormes. Si como se dice en un comentario, vivia con prebendas, las dejo a un lado para trasladarse al terreno de esa otredad peligrosa que es en Cuba el terreno de la oposicion o la disidencia. Hector ha sufrido el ostracismo del Regimen y la represion en el alma de su hija por matrimonio, Giselle y de su madre. En la Primavera Negra de La Habana, cuando la razzia de treinta militares invadio su casa para revolver y destruir papeles, libros, revistas y un viandero vacio excepto por tres papas, en esos mismos momentos la policia politica estaba en casa de su madre de mas de ocho decadas de edad registrando, revolviendo sus limitadas pertenecias, buscando alguna evidencia que justificara la condena a Hector, que ya estaba impuesta; con un medico y un oficial ofreciendole a Maria dinero y medicinas para “ayudarla” en esta situacion. Dinero y medicinas que rechazo esta digna cubana que vive de un minimo ingreso y de los huevos que dan las gallinas que cria en el patio de su reducida casa. Y les dijo que no podia aceptar ninguna ayuda de las mismas personas que encarcelaban a su hijo por pensar de forma diferente. A su hija Giselle comenzaron a asediarla en el preuniversitario donde estudiaba,primero el director que fue a su aula para hablar de los “vendepatrias” delante del resto de sus companeros; tiempo despues se reunio con ella la maestra que Giselle mas queria para pedirle que renegara de su madre y de su padre. Giselle contesto valientemente pero el desconcierto y el dolor en su corazon ya no solo lo producia la represion sino que su maestra mas querida le pidiera que abandonara a sus padres. Hay mucho mas en el tintero sobre la represion contra esta familia; los actos de repudio frente a la casa de dos mujeres solas mientras el esposo y padre esta a kilometros de distancia en una celda minima y mas. No vi la celda de Hector pero si estuve en la entrada de esa prision en Pinar del Rio, donde se espera para pasar a la visita o para dejar la jaba; hay capas de suciedad en las mesas y olor a excremento humano, no porque los visitantes hayan abandonado sus costumbres higienicas_somos uno de los pueblos que mas persigue la limpieza en el mundo-sino porque el servicio sanitario estaba desbordado y cuando limpian-lo hicieron estando yo alli-pasan una escoba por el piso; no, arrastran una escoba por el piso y las mesas: esa es la limpieza. Imagino como seria la celda. Alli llegue con Gisela Delgado y Elsa, la esposa de Arroyo para que Hector supiera que si no podia llegar hasta su celda al menos llegaba hasta las puertas de la prision. Pase varios dias en casa de Hector, nada habia para comer y no crean que aporte mucho; todo lo que se recauda para la oposicion apenas alcanza para transportarse y desarrollar el trabajo. En el caso de los presos, apenas para llevarles alimentos. El alto costo de la vida en Cuba hace de estas tareas trabajos de Hercules. Cuando en esos dias fui a ver a Maria, la madre de Hector, la encontre preocupada pero firme, alegre por la visita; minima contribucion pues nuestro deber es estar presos con ellos, aunque aun en exilio no somos totalmente libres. Alli solo habia lo minimo para alimentarse y el carinyo de algunos vecinos fieles, el cuidado de Jose, el hermano de Hector pero no habia prebendas, esas que Hector estaria disfrutando, segun un comentario anterior, si no hubiera escogido este camino. Estuve en su casa, un mes y dias antes de su arresto del 2003, con mucha calma,con el sosiego que le es habitual, me dijo que se acercaban dias muy dificiles para la oposicion. No rehuye esa dificultad, no cesa en su empenyo y se lo llevan para las ergastulas. Hablamos hasta la madrugada, el le mando a mi esposo Tony y a Remberto Perez, unos tabacos, regalo de unos campesinos del Escambray y lleno con eso de alegria mi casa, tener en nuestras manos tabacos de Manicaragua torcidos por unos campesinos que cultivaba un metro de tierra era otra expresion de libertad. En todas las ocasiones en que hable con Hector personalmente y por telefono, su voz era firme y su cuerpo solido, a pesar de que ya sufria malestares. Hector es un hombre gentil, muy agudo, extremadamente inteligente, vacio de odios y con un gran amor a Cuba. Da gusto sentarse en la casa de Gisela y Hector, en ese sillon de su familia al que le falta un brazo, inclinarlo hacia el balcon y ver como los helechos se enredan dibujando fantasias en el aire puro de esta casa donde viven unos de los seres mas libres del mundo, esa libertad que se paga con las rejas. Ahora su voz sale entrecortada por las izquemias y la falta de oxigeno en su sangre, se le nota debil y ha aumentado de peso por la falta de ejercicio en la prision, lo que lo llevo a mas falta de oxigeno y a la imposibilidad actual de hacer minimos esfuerzos fisicos. Sufre dolores fuertes. Hector es el mismo hombre de valentia serena que inicio su lucha en esta guerra civil atipica que requiere estrategias y tacticas nada convencionales. A los soldados, en las guerras, se trata de recuperarlos fisicamente, para reintegrarlos al combate. Y esta es una guerra, por medios pacificos pero una guerra en la que los opresores si tienen las ventajas de los chuqueos medicos y la restauracion fisica. En la casa de Hector y Gisela, la unica joya que encontre fueron esos helechos enroscados en el balcon, vigilados desde el frente por miembros de las Brigadas de Respuesta Rapida. He visitado a muchos otros opositores y solo ha visto limitaciones economicas y sacrificios. La historia de la represion contra ellos no esta aun escrita y no se conoce totalmente. Ojala un dia podamos hablar todos en paz sobre estas cosas en cualquier sala de cualquier cubano y podamos enterdernos. A eso aspira esta familia, a que todos participemos. Lo demuestra en su entrevista, en la que como hombre de honor agradece las gestiones a su favor sin dejar de criticar. Una vez mas pone el interes nacional por encima del personal. Mientras tanto, ante ti Hector, ante ti, Gisela, ante su familia, yo me quito el sombrero, como dicen en Madrid. Cuidense mucho. Teresa Cruz New Jersey.

7 by Mario Faz (Usuario no autenticado) 26/10/2007 19:40

El beneficio de la duda! Hay otros disidentes presos en condiciones iguales o peore que no liberan y deportan. Carajo! Lo mismo que sucedio en el los sesenta (batistianos, burgueses y profesionales) en el ochenta (los de "Esta "fue" tu casa Fidel" y pseudosocialistas descontentos)y de los noventa para aca, los que tuvieron la desgracia de haber nacido en un pais que solo busca soluciones en la huida gracias a la Ley de Ajuste Yanqui y la benevolencia de la Espana de siempre. Soy uno de esos que llego aqui en el 1990 pero mi cobardia la justifico con el desengano de haber visto a amigos e incluso familiares volverme la espalda al salir en libertad por en los indultos de 1979. Extendi mi condena 11 anos pero el asco era demasiado hacia mi generacion. Espero que la de mi hijo y nieto no sean como la mia. Esa es mi Patria otra, la anterior, ha muerto. La nueva se erguira sobre tumbas y desenganos. Dios los proteja en ese camino amargo de sudor y recuerdos.

6 by Mario Faz (Usuario no autenticado) 26/10/2007 19:40

Bravo por el gobierno de Zapatero y Moratinos! Si, han hecho una accion encomiable aceptando al Senor Hector Palacios por tres meses de permiso de salida para recuperarse en un hospital de Madrid. Pero y siempre un pero digo yo. Mas favor le hacen al gobierno cubano pues saben bien esos dos politicos que Hector Palacios no regresara a Cuba. Le han puesto una pincelada de colorete al demacrado Fidel Castro y le han regalado una camisa verde olivo limpia del Corte Ingles a Raul I. Estos "socialistas" me huelen mas a franquistas que Carrero Blanco en su ultimo viaje por Madrid antes de que volara por los aires. Raro es que no aparezcan retratados en la portada de Hola en el momento de recibir a Palacios en Barajas. seria muy buena publicidad para el PSOE. No creen Uds.

5 by Ernestina Quintana (Usuario no autenticado) 26/10/2007 19:30

Conocí a Hector Palacio cuando era el director de la empresa Adolfo Guzman, recien llegado de Oriente porque trabajaba con Armando Hart, era bien come candela incluso extremista políticamente, aunque una persona educada y amable.Le deseo que se recupere pronto.Aunque los pases de posiciones políticas de un lado para otro me provocan muchas dudas. Ernestina Quintana

4 by Emelina Cundeamor (Usuario no autenticado) 26/10/2007 13:50

Seria lo minimo que pueden hacer,pues fue Espana quien envio medicinas al coma-andante cuando sus cagaleras incontenibles..no?

3 by Leonora del Monte (Usuario no autenticado) 26/10/2007 13:50

Ahora pienso en los Llamados Cinco heroes prisioneros del imperio, cuya campaña de liberacion es apoyada financiera y politicamente por el regimen de castro..cuando su familia los va a ver a la carcel..lucen ropa limpia y aspecto saludable...se dan el lujo de cambiarse el corte de pelado, la forma del bigote, de escribir y reunirse con pastores y personas que apoyan su causa..,no es realmente contrastante ver lo que pasa con los prisioneros politicos en Cuba..por que todos salen enfermos, con el lastre de enfermedades cronicas que adquirieron en prisión, entonces sus familiares derraman lagrimas de sangre para que puedan ser asistidos con decencia... y todavía hay quien afirma que en Cuba no se violan los derechos humanos...cuantas cosas ocultas nos quedan aun por conocer...Patria y Vida!!!

2 by el observador (Usuario no autenticado) 26/10/2007 13:00

ojalá sea un síntoma de que la política de moratinos da sus resultados y que después de palacios sigan otros que necesiten y pidan tratamiento médico en españa,,, quizá en algunos comentarios en esta página hemos sido excesivamente duros con la política de españa hacia cuba,,, debemos concederles el beneficio de la duda y que algo influyan en diálogo con el Gobierno, pero sin olvidar que los disidentes existen y representan el futuro,,,

1 by palmiche (Usuario no autenticado) 26/10/2007 11:50

La verdad, no entiendo por qué a Héctor Palacios y a su mujer le han dado tres meses de permiso para atender su salud en España. Hay muchos presos políticos, disidentes y familiares enfermos que también deberían ser apoyados por los mismos que gestionaron la salida de Palacios y señora. Es el caso de Bárbara Elisa, la viuda de Miguel Valdés Tamayo, quien antes de morir su marido tenía visa para viajar a Estados Unidos y Holanda. O el mismo Jorge Olivera, quien desde 2002 tiene visa para viajar a Estados Unidos como refugiado político y no sólo no lo han dejado salir con su familia, sino que lo metieron preso en marzo de 2003. Además de enfermo, Olivera vive con la continúa pesadilla de que en cualquier momento lo encarcelan nuevamente. Por qué no dejan salir a Hilda Molina y su madre? Por qué no dejaron ir a René Gómez Manzano a recoger el premio que le concedieron en Bruselas? Hay más ejemplos, pero éstos son los que de momento he recordado.

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