Crónicas
Especies en extinción
Al paso que vamos, hay que aceptarlo, ni naranjas tendremos dentro de poco.
Cada vez se habla más de un mundo donde algunas especies zoológicas serán cosas de un pasado remoto, tan remoto, tan mítico incluso, que el hombre de entonces, al oír hablar del esqueleto de un leopardo que en aquellos fabulosos tiempos de antaño fuera visto en la cumbre helada del Kilimanjaro, correría al diccionario de antigüedades a buscar la palabra "leopardo".
La campaña por la conservación de las especies es fuerte, gana cada vez más espacio. Sin embargo, nadie se preocupa de la extinción de las especies vegetales, entre ellas, las de las frutas.
En Cuba, todavía en el año 1958, vísperas del triunfo revolucionario, la Isla olía a frutas. Ese era el olor cubano. El olor que enervó al poeta Nápoles Fajardo, el Cucalambé, y lo llevó a cantar las galas de Cuba, contribuyendo a la aparición de nuestra nacionalidad con esa diferenciación de olores y sabores que sugerían aquellos novedosos nombres que nada tenían que envidiar al de los gastados "pera", "uva", "manzana", "melocotón".
De las frutas que aquel bardo menciona en sus décimas, han desaparecido la mayor parte. La polución de los suelos y los cambios del clima causados por los desafueros cometidos por los países desarrollados contra la naturaleza, las extinguieron.
Del platanito fruta, joya con cinco o seis variedades en otro tiempo, hoy queda una: el Johnson (marteño en la antigua provincia de Oriente), al que se quiere ayudar con un simulacro de plátano de origen vietnamita, con sabor a cartón, que ni nombre tiene. Y del mango no hablemos. El bizcochuelo ha desaparecido, el corazón, el toledo y otros de las cincuenta variedades que se conocían, lo mismo.
Y de las que perduran, es su producción tan escasa, que el mango de dos o tres libras, que antes costaba en mostrador dos o tres centavos, ahora emocionado de saberse alguien, vende su libra a cuatro pesos —igual que el de la antaño humilde frutabomba—, por lo que comerse un mango decente en la actualidad es un privilegio, casi un don, para embajadores, gerentes de firmas y elegidos por el estilo.
También los precios de la naranja suben de año en año. Todavía hace cuatro años, estaban a veinticinco centavos la libra, al siguiente subieron a treinta y cinco, el año pasado a sesenta en los mercados estatales, y en los de libre oferta, a un peso con cincuenta centavos. Este año no sabemos a cómo vendrán.
Menciono las naranjas, los platanitos-fruta, el mango, la piña y la frutabomba (papaya, como con la boca mojada de sólo pensar en ella le llamábamos en Oriente), porque son las que llegan al mercado. Ver en La Habana un mamey, digamos, un zapote, un níspero, un anón, un anoncillo, un tamarindo, es muy raro, sin contar con que si los vieras al pasar, te mirarían con el desinterés de la jinetera que se sabe lejos de tu alcance.
Y si un día apareciera el que diga que ha visto un marañón o una granada o un canistel, dile que miente, y corre a llamar a una ambulancia porque de seguro estarías en presencia de un caso clínico muy peligroso.
Mañana nadie sabe cuánto costaría una ciruela criolla, que tampoco se ve ya. Es una ley a la que tampoco escapa el mercado de los animales en extinción. Con lo que antes compraba en Kenya el circo Santos y Artigas un elefante puesto en La Habana, hoy no podría comprar ni la mitad de un colmillo.
Una escenografía fantástica
Claro que el imperialismo norteamericano, como parte de su astuta política para no firmar el Tratado de Kioto, niega esta galopante extinción que en Cuba está teniendo lugar y de la que en el mundo no se habla, atribuyéndosela a las supuestas ineficiencias de la explotación agrícola del socialismo. Ello, por supuesto, con mucha discreción. Valiéndose inclusive de agencias televisivas del socialismo del siglo XXI inteligentemente manipuladas.
El otro día, por ejemplo, en un reportaje originado en Telesur (y que nadie sabe cómo pudo írsele de la mano al estricto Canal Educativo), aparecía en el mercado de Sao Paulo medio kilómetro de tarimas, a ambos lados colmadas con 180 variedades de frutas resplandecientes y de vistosos colores. Era una escenografía fantástica, desde luego. La escenografía de un genio que quiso medirse con Spielberg. Por un momento, uno se sintió en la Cuba de los años anteriores a 1959. Era el propósito.
Claro, los televidentes cubanos no nos dejamos engañar. Sabemos que el clima de Brasil y el nuestro son muy semejantes, de modo que las frutas de ese supuesto mercado debieron ser de papel maché, mentiras imperialistas para hacernos dudar de la eficiencia agrícola de la revolución.
En un mundo donde la tecnología (la del imperialismo sobre todo) está acabando con la naturaleza, hay que aceptarlo, ni naranjas tendremos en Cuba dentro de poco.
Y no hablo de ahora, después del paso de los tres huracanes, hablo del porvenir que está ahí detrás de la puerta y que nos tiene temblando, pues a la par de la extinción de las frutas apareció la de las viandas y hortalizas, renglón donde también los precios han tenido que entrar a jugar un importante papel en el control del consumo. La malanga a cuatro pesos la libra, la yuca a tres pesos o cuatro, la col a diez pesos o más, la zanahoria a diez la libra, la cebolla a quince o veinte pesos, la cabecita de ajos (con dientes como los de los niños de dos años) a cuatro pesos, más que predecirlo, lo proclaman dicho con letras bien grandes y cuño de lacre encima.
Pero al cabo (un pajarito que venía del porvenir me lo dijo muy de prisa), también contra la extinción de las especies agrícolas, venceremos finalmente los cubanos.
© cubaencuentro
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18 Comentarios
18 by El Fantasma (Usuario no autenticado) 26/02/2009 13:00
Y Recordemos los pregoneros que recorrian as calles de todas las ciudades de Cuba anunciando frutas... frutas del caney... El maisero... yerberito... la cancion popular cubana se nutrio de las frutas, pero entre las construcciones militares, la brigada che guevara y las f 1 acabaron con los campos... la guayaba cotorrera se acabo, y con ella las cotorras.. solo quedan las cotorras del regimen, lase Felipito, y la cotorra en jefe....
17 by cheo malanga (Usuario no autenticado) 26/02/2009 13:00
De la Cuba que canto Felix Caignet en Frutas del Caney, no queda nada. Empezo con la famosa Brigada Invasora, que con el pretexto de acabar con el marabu, acabo con los montes y frutales del pais. Luego, el horror del Plan cordon dela habana, que cabo con los frutales de la llanura roja Habana- Matanzas, las tierras mas fertiles de Cuba, y todavia estamos esperando por el cafe caturra... Luego, el plan de las F!, con Voisan de bandera... en definitiva un fracaso mas del coma andante... como todos en su vida, empezando por el Bogotazp....
16 by El anticomunista (Usuario no autenticado) 24/02/2009 21:40
Yo creo que el problema esta , qu las tierras estan bloqueada por el , inhumano bloqueo imperialista , mira que son malos echos imperialista , un pais donde las manzanas las uvaas y peras se dan como las piedras!!!!! na estan bloquedas, la culpa al imperio si, al imperio comunidta!!!
15 by Santa Clara (Usuario no autenticado) 24/02/2009 11:20
Para Juan Alvarez (11): Cierto, releyendo el artículo -y queriendo verla- noto la intención del autor de ser irónico, aunque en mi opinión no logra ser auténticamnete irónico, de lo contrario seríamos menos los que no habríamos entendido el artículo. En ese sentido mis disculpas al autor y a Cubaencuentro. Pero al margen de que sea yo capaz de discernir entre un texto irónico y uno directo: Me puedes explicar: ¿por qué debo extinguirme? ¿es suficiente no entender la ironía del sr. Alcides para tildar a alguien de escaso de mente? ¿de dónde sacas que mi "cultura" no va más allá de los comics? Cuando de ellos no he leído más que los de Ralf König y de eso hace muy poco. Y sí creo tener en mi haber mucha literatura de la que espero tú también aprecies. ¿O es que intentabas tú también ser irónico y se me ha vuelto a escapar la ironía? ¿Te dieron la inteligencia y la erudicción de niño por cucharadas como te daban el bicomplex? Independientemente de las diferencias los cubanos deberíamos aprender a dialogar sin ofender.
14 by Douglas Fernández (Usuario no autenticado) 24/02/2009 7:40
Cuba:la tierra de la fruta,del delicioso mango,de la rica piña,del dulce tamarindo,de la fruta bomba o papaya,de las jugosas guayabas...... Pero......porque siempre en Cuba hay un bendito pero para casi todo,el comediante en jefe prefería sembrar caña de azúcar o café donde no era pertinente. El desastre ecológico y agrícola en Cuba ha sido de proporciones catastróficas por las malas políticas del régimen y en particular por el "experimentador en jefe"
13 by Ataja (Usuario no autenticado) 24/02/2009 0:03
Okey, pero en las despensas de Punto Cero, alla donde se aloja el parasito mayusculo y reflexionante no faltan esas frutas, ni los quesos, ni las carnes de primera, ni las langostas, ni otros mariscos, buenos pescados, leche de bufala, jamones importados, vinos, whisky del bueno, cognacs, y otras exquisiteces reservadas para la familia del "elegido" Shah de la destruccion desenfadada e infiscalizable.
12 by cubasere (Usuario no autenticado) 24/02/2009 0:02
Hay gente que no entiende cuando un escritor utiliza recursos expresivos como la ironia o el doble sentido. No se dan cuenta algunos aqui que esta es una forma sutil, pero poderosa de condenar el pésimo manejo de nuestros recursos agrícolas y la economía en general por parte del sabelotodo comandante. El autor utiliza las propias excusas del sistema de la isla, desnudando las "razones" durante mucho tiempo esgrimidas por el régimen, para ocultar su incompetencia y el daño que han hecho a nuestra economia y a nuestro paladar y estómago. Muy bien escrito, muy ingenioso y lleva mucha razón. Segun parece Gracie(#8)y Santa Clara(#5) no se han enterado sobre lo que trata el artículo. Lo leyeron, pero no lo entendieron. Un consejo: Cuando uno no entiende algo, lo que debe hacer es leerlo varias veces, o preguntar e informarse,y luego, con conocimiento de causa, criticar. Refrán: Mas vale preguntar y pasar por tonto 5 minutos, que no preguntar y quedarse de tontos toda la vida. Debian disculparse con el escritor, a quien le han colgado distintos epítetos y resulta que el hombre está del mismo lado que ustedes !!!
11 by Juan Alvarez (Usuario no autenticado) 24/02/2009 0:00
Los que deberian de extinguirse son algunos de los que escriben comentarios pues su escasez de mente les impide analizar o interpretar un texto a no se que su "cultura" no vaya mas alla de los comics. A menos aprendieron a escribir aunque sea mal.
10 by The Cuban (Usuario no autenticado) 24/02/2009 0:00
Yo he ido varias veces a Cuba. La última hace un año. Las frutas las sigo comiendo igual. Es verdad que no hay la abundancia de antes por una razón; y es que la empresa "Frutas Selectas" ha invadido a los campesinos para que le cambien sus frutas por unos míseros puntos que luego cambian por comida o algo de ropa en las "Tiendas de estímulo". A pesar de esto nunca dejé de comer buenas mandarinas, naranjas, mangos deliciosos, y cuanta fruta se me antojase. Todo esto depende del lugar que visites. Cuba aunque no lo creas es muy grande y hay lugares que son una tacita de oro. Saludos.
9 by Hildemaro Montejo (Usuario no autenticado) 23/02/2009 19:20
Parece que algunos comentaristas no han logrado entender la verdadera ironia que destila este formidable articulo. Lastima por ellos. Tambien por los habitantes de la pobre isla de Cuba que no pueden, como antes mu- chos si pudimos, deleitarse con las maravillosas frutas que por alla abun- daban. Rafael Alcides debio haber incluido esa bella cancion original de Felix B. Caignet, "Frutas del Caney", interpre- tada por el famoso Trio Matamoros. Qui- zas esa cancion suene hoy subversiva pa- ra muchos funcionarios del regimen, pro- ducto de invenciones de la CIA o vaya Ud. a saber que excusa encuentran pa- ra desmentir que antes del derrumbe que comenzo en 1959, en cualquier esqui- na de cualquier pueblo o ciudad frutas cubanas era lo que sobraba, al alcance de todos. Quien no recuerda aquellas carretillas con una piramide de naran- jas que se veian en todas partes? Quien no recuerda los sabrosos "batidos" frutales que se expendian a 10 ctvs, los dos vasos?. Frutas como las que menciona Alcides se ven solo en pinturas. Pero olvido men- cionar otras tales como el limon, coco, guanabana, mandarina, guayaba, toronja, chirimoya, melon de castilla y tantas otras desaparecidas del mapa por el huracan "fidel". ! Que desastre! Aqui solo resta recordar la cancion del autor colombiano Jose Maria Penaranda "en Cuba no falta nada".
8 by Gracie (Usuario no autenticado) 23/02/2009 19:20
De donde salio este loco? Lo que tenga de escritor este individuo me lo tomo yo del veneno mas fuerte que exista sin temor a sus efectos. Este es un alcides cualquiera metiendo entre palas de cal y cal una de arena. Cuba Encuentro debia ser un poquito mas serio en lo que publica en su portal pues articulos basura como este ponen en duda la calidad periodistica (y ni hablar de politica!) de su personal administrativo. Este tipo es un charlatan y su articulo no tiene sentido alguno, a no ser para poner algunas palas de arena en contra del temido "imperialismo yanqui", que por cierto a pesar de lo mal que han hablado de el durante 50 an~os no fue el que invadio a Cuba para destruir a la revolucion de los Hermanos Castro, por suerte esta se esta destruyendo a si misma sin la ayuda de los yanquis.
7 by Ernesto Nunez (Usuario no autenticado) 23/02/2009 19:20
Definitivamente la culpa de todo la tiene el inperialismo yanquy, porque ya ni se le puede hechar culpa al TOTI porque la pobresita ave tambien esta en extincion como las frutas. Muy bueno el comentario de Rafael Alcides, lo que hay que leerlo con imaginacion. Yo recuerdo cuando siendo aun ninio viviendo en Cuba durante las decadas de los 60 y 70 como se dinamitaban los frutales por las ideas utopicas del "sombi" comanducho en jefe.
6 by juan el frutero (Usuario no autenticado) 23/02/2009 15:40
Hay que ser realmente un bobo para no darse cuenta de la ironía de Alcides cuando achaca al cambio climático la desaparicion de las frutas en Cuba. Aprendan a leer al gran poeta, carajo
5 by Santa Clara (Usuario no autenticado) 23/02/2009 14:20
Sin duda es cierto lo del cambio climático pero... ¿es esa la principal razón de la desaparición de las frutas en Cuba? ¿Dónde quedaron el centralismo y la planificación a más que corto plazo de la llamada revolución cubana? ¿Dónde quedaron los despropósitos del monocultivo? He estado en brasil y sí que he comido marañón & Co. a tutiplén. Y ahí se sufren las consecuencias del capitalismo brutal que tú mismo arguyes. Perdona pero disculpa Alcides: tronco de porquería de artículo mal investigado el que acabas de escribir y mi atónita reprobación a Cubaencuentro por publicar algo así.
4 by Amalia. D.N. (Usuario no autenticado) 23/02/2009 13:40
No nos olvidemos del desmonte de nuestros árboles frutales para sembrar caña en el caprichito del comadante de la zafra de los 10 millones, desmantelando las fincas de frutales de la rica región habanera. No hay que ir tan para el cono sur para saber el alcance del desastre ecológico de esa dictadura. En República Dominicana, la isla vecina, la agricultura abastece el 80% de las necesidades del país y en cualquier esquina ud. puede ver un buen puesto de frutas surtidas cual arcoiris de nuestro trópico.
3 by lina diaz montalvo (Usuario no autenticado) 23/02/2009 13:40
lo que tiene que hacer el gobierno es abrir un pocola puerta para que entre el aire, y ya veran como se produce y no falta de nada.''¡¡¡
2 by Moyero (Usuario no autenticado) 23/02/2009 11:40
Pero en Cuba todavia hay muy buenas papayas!
1 by cochinillo ilustrado (Usuario no autenticado) 23/02/2009 7:40
Muy buen artículo. Las frutas, como las fritas, fueron víctimas de la Ofensiva de 1968. Los mangos, los mangos deliciosos...