Dos guardias civiles españoles murieron este miércoles en un atentado con bomba perpetrado por la organización terrorista vasca ETA, que el martes había causado 66 heridos con otra explosión.

El atentado se produjo junto al cuartel de la Guardia Civil (un cuerpo policial) en Palmanova, en el municipio de Calvià en la isla de Mallorca, a donde llegarán los reyes de España el próximo sábado a pasar sus vacaciones, informó el diario El País.

El delegado del gobierno en las Islas Baleares, Ramon Socías, dijo que los fallecidos son dos agentes, de 27 y 28 años de edad, que se encontraban en el interior de un todoterreno de la Guardia Civil.

De acuerdo con El País, las primeras hipótesis apuntan a que la explosión la ha ocasionado una bomba lapa adosada al coche y activada a distancia. Ambos agentes iban de civil, trabajaban en labores de mantenimiento y estaban de servicio en el momento de la explosión.

Parte del cadáver del agente que estaba en el asiento del copiloto apareció sobre un árbol, según los bomberos, lo que da una idea de la potencia de la explosión. El otro estaba tendido en el suelo. Los servicios de emergencia trataron de reanimarle, pero fue inútil.

Las fuerzas de seguridad española pusieron en marcha una "operación jaula" para tratar de capturar a los terroristas, por lo que el aeropuerto y el puerto de Mallorca fueron cerrados después del atentado. El aeropuerto reabrió en la tarde.

El área de la explosión, muy concurrida ya que cerca hay una oficina de correos y un centro de salud, se encuentra a 500 metros de una playa en una zona de mucho turismo internacional y a pocos kilómetros del Palacio de Marivent, donde veranea la familia real. ETA, que cumple el viernes 50 años de creada, ha asesinado en ese tiempo a 206 guardias civiles, incluidos los dos fallecidos este jueves. La organización ha matado en total a 828 personas.

Éste es el noveno atentado de la organización terrorista vasca este año y eleva a tres los muertos, todo ellos miembros de las fuerzas de seguridad españolas.

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