Varios peloteros cubanos, encabezados por Yunel Escobar, Kendry Morales y Bryan Peña, terminaron con magníficas actuaciones la última temporada de béisbol de Ligas Menores.

El trío, que ha jugado posteriormente y se mantendrá hasta final de temporada en las Mayores, dejó una grata impresión a su paso por Triple A. Al igual que el matancero Amaury Cazañas, quien se destacó notablemente con el equipo Petroleros de Minatitlán, de la Liga Mexicana.

La mejor demostración fue la de Escobar. Tan sobresaliente, que rápidamente escaló la Gran Carpa en la nómina de los Bravos de Atlanta. Durante su estancia en el Richmond en los meses de abril y mayo, bateó para 333, con una hermética defensa en el campo corto.

Kendry Morales, jugador del primer cojín, permaneció gran parte de la campaña veraniega en el Salt Lake, equipo finca de los Ángeles de los Ángeles. En 64 partidos produjo para 341. Después de estar en el equipo grande, fue devuelto a la sucursal principal, pero desde el pasado 23 de agosto fue reclamado finalmente por los Ángeles, donde se mantendrá hasta el 30 de este mes, última fecha de la contienda regular.

En cuanto al capitalino Bryan Peña, que nunca estuvo en series nacionales, se mantuvo como receptor de puntería con el Richmond y en 94 desafíos consiguió un buen promedio de 301, que le sirvió para volver al Atlanta.

Buen despegue en la Liga Mexicana

El matancero Amaury Cazañas, que hace cerca de dos años abandonó la Isla, debutó en México con los Petroleros de Minatitlán, donde fue seleccionado el jugador más destacado del colectivo, al terminar primero en jonrones con 15 vuelacercas y 71 impulsadas, y tercero en ofensiva con 337 en 96 encuentros. Estos resultados probablemente le abran las puertas de la pelota norteamericana el próximo año.

Otro jugador que mostró credenciales, aunque en categorías inferiores, fue el pinareño Juan Miranda, que arrancó con el Tampa (Clase A), perteneciente a los Yankees de Nueva York. En 67 desafíos consiguió 9 cuadrangulares y 50 empujadas con average de 264. Le ascendieron al Trenton Thunder (Doble A) y despachó 7 pelotas por encima de las cercas y 46 remolcadas con average de 265. Lo más importante es que al sumar ambas actuaciones se observan sus 15 batazos por encima de las bardas y 96 carreras fletadas para el home, números significativos para su futuro.

Alex Sánchez, reservista de Industriales en 1994 y ex Grandes Ligas que fue llamado por el Charlotte, logró un porcentaje elevado de 359 en 24 juegos, con 37 indiscutibles en 103 oportunidades. Pero al parecer ha desaparecido su gran habilidad de robar bases debido a lesiones en su periplo por las Mayores: en seis intentos sólo estafó en tres ocasiones. También el habanero Bárbaro Cañizares estuvo en el Richmond: en 49 choques conectó 56 hits en 163 veces y promedió 344.

Los pitchers no estuvieron igual

El grupo de lanzadores que participó en esta campaña con las novenas sucursales de Grandes Ligas no estuvieron a la altura que ellos mismos deseaban y también sus equipos. Quizás el mejor fue Michael Tejera, con experiencia en el béisbol élite. Con el Indianápolis (Triple A), perteneciente a los Piratas de Pittsburg, ganó 8 y perdió 5, con porcentaje de 3.90 en 127 entradas como abridor.

El otro tirador que obtuvo algún resultado fue Francisley Bueno. El ex jugador de Industriales, alistado en el Misisipi (Doble A), del Atlanta, terminó de noveno en carreras limpias con 3.67 de efectividad en la Souther League. Subió posteriormente al Richmond, donde trabajó 19 capítulos en los que ponchó a 19, con 2.79 de promedio y uno ganado sin reveses. En 2006 tuvo un pobre desempeño con el Misisipi, al perder 7 veces con una victoria.

Vladimir Núñez, del Charlotte (Triple A), tuvo una actuación pésima, con 4 y 9 y 5,61 en 23 salidas. Yoslán Herrera, del Altoon Curve (Doble A), terminó con 6 victorias y 9 fracasos en 128 innings, donde toleró 15 imparables.

Más cubanos en las Menores

En el complejo mundillo beisbolero, con cientos y cientos de equipos, resulta difícil encontrar a los jugadores cubanos en las diferentes categorías. Al final de la justa, supimos que Yuneski Sánchez, torpedero regular de Matanzas en la Serie Nacional de 2003-2004, jugó todo el calendario con el Silver Hawks, de la Midwest League (Clase A). El joven, de 23 años, bateó 282 en las 110 presentaciones de su equipo y fue seleccionado para el juego Todos Estrellas, efectuado a mediados de la lid.

El otro "aparecido" fue el lanzador villaclareño Reidier González, de 22 años, que no tuvo participación en las series nacionales. Con la misma novena de Sánchez, obtuvo 9 éxitos, 7 descalabros y 3.53 de carreras limpias permitidas.

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