La lucha individual por ganar un puesto en la Selección Nacional será uno de los mayores atractivos de la edición 48 de los campeonatos de béisbol en la Isla, que se inaugurará el sábado 29 de noviembre con un juego entre el monarca Santiago de Cuba y el vicecampeón Pinar del Río.

Aunque nadie se haya hecho eco de esta suposición y mucho menos los peloteros, lo lógico es que así piensen los participantes de los 16 conjuntos, después de los fracasos continuados del equipo Cuba, que más o menos ha presentado el mismo núcleo desde el año 2001, pero que ha perdido la ruta ganadora en los últimos eventos.

Lo anterior está relacionado directamente con el anuncio de que el torneo será suspendido después del desafío 57 de los 90 programados, exactamente entre el 13 de febrero y el 7 de marzo, para dar paso a la preparación del elenco mayor que intervendrá en el Segundo Clásico Mundial, programado para el mes de marzo.

Cuba debutará frente a Sudáfrica el 8 de marzo en México, como parte de una ronda eliminatoria donde estarán también Australia y el equipo azteca. De ahí que numerosos jugadores arrancarán el certamen nacional a toda máquina, con el interés de ser convocado para la gran contienda internacional.

No obstante, los dirigentes que tienen que ver con el béisbol, desearán llevar a "los de siempre", no importa que hayan perdido con frecuencia desde 2006, pero de esa manera piensan que ninguno de los peloteros clave, se les "escape" hacia Estados Unidos, la meca del deporte de las bolas, los strikes y las bolsas millonarias.

Cambios en la estructura

En la búsqueda de mejorar resultados, volverá la Liga de Desarrollo, que funcionará simultáneamente con la lid nacional, que permitirá un sistema de altas y bajas con oportunidades para noveles atletas que no pudieron integrar los seleccionados provinciales.

Otra innovación fue la suspensión de los grupos (A y B) y (C y D). Sólo se mantendrán las novenas asociadas en las Zonas Occidental y Oriental, donde clasificarán para la postemporada los ocupantes de los cuatro primeros puestos.

De más está señalar que las Avispas salen nuevamente de favoritos para llevarse el trofeo principal, debido a que vuelven a presentar su conjunto estable de varios años y porque nunca uno o más de sus primeras figuras se ha marchado del país, como le ha ocurrido a Industriales, Villa Clara y Pinar del Río.

Principales opositores de los dirigidos por Antonio Pacheco, deben ser los representantes de Villa Clara, Ciego de Ávila y Las Tunas, en tanto los vueltabajeros deben sufrir el asedio de industriales, habaneros y espirituanos, aunque en béisbol cualquier cosa puede ocurrir.

Dos peloteros que se hicieron sentir en la pasada serie estarán en la mirilla de los aficionados: el jardinero derecho Alexei Bell, del conjunto santiaguero, y el lanzador Yulieski González, del Habana.

Bell se destapó a dar jonrones y no paró hasta llegar a 31, pero también impulsó a 111 corredores para echar abajo los récord anteriores. El zurdo González obtuvo 15 victorias sin derrotas y un excelente promedio de 2.25, cifras muy difíciles de obtener en cualquier tipo de béisbol.

La 48ª Serie Nacional será también algo así como un analgésico para la gran masa de seguidores que tiene el juego de pelota, después de la devastación producida por los ciclones que en fila india azotaron el país y aumentaron la precaria situación existente desde hace muchos años.

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