La Universidad de Salamanca (USAL) y Patrimonio Nacional organizan una jornada de estudio en honor a la poeta cubana Fina García Marruz, ganadora del XX Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana, informa el diario local Tribuna de Salamanca.

La jornada se celebra este miércoles 2 de mayo, en la Facultad de Filología de la Universidad salmantina y en la inauguración del acto intervendrá la secretaria general de la Universidad, Ana Cuevas Badallo; la vocal asesora de Programas Culturales del Patrimonio, Pilar Martín-Laborda y Bergasa; el nieto de la galardonada, José Adrián Vitier; la secretaria del premio, Esther Martínez Quinteiro; y la catedrática del Departamento de Literatura Española e Hispanoamericana y coordinadora de la jornada, Carmen Ruiz Barrionuevo.

De acuerdo a la nota, “Viaje a Nicaragua, crónica de un viaje” es el título de la conferencia inaugural que comenzará a las 11:30 horas, y que será pronunciada por Diony Durán, especialista de la Universidad de La Habana.

Posteriormente, a las 12.30 horas, comenzará la mesa redonda con los académicos y literatos Catalina García García-Herreros, Ioannis Antzus Ramos y Luis Rafael Hernández.

A partir de las 17.15 horas tendrá lugar la conferencia de la académica de la Universidad de La Habana Ivette Fuentes de la Paz, titulada “La gravedad y la gracia de las miradas perdidas. Acerca de la poesía de Fina García Marruz”.

Finalmente, tras la lectura poética de Catalina García García-Herreros y Vega Sánchez Aparicio, se clausurará el encuentro con las palabras de José Adrián Vitier, nieto de Fina García Marruz.

La escritora cubana ganó el año pasado el Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana, que reconoce el conjunto de una obra de un autor vivo que por su valor literario constituye una aportación relevante al patrimonio cultural de Iberoamérica y España.

García Marruz perteneció al grupo de poetas de la revista Orígenes(1944-1956) junto a su esposo Cintio Vitier. Desde 1962 trabajó como investigadora literaria en la Biblioteca Nacional José Martí, y desde su fundación en 1977 hasta 1987 perteneció al Centro de Estudios Martianos, donde alcanzó la categoría de Investigador Literario, integrada en el equipo realizador de la edición crítica de las “Obras Completas” de José Martí.

Su poesía ha sido traducida a varios idiomas. Entre otras antologías, figura en la editada por Carmen Conde Once grandes poetisas hispanoamericanas (Madrid, 1967), y en la de Margaret Randall Breaking the silence (Vancouver, Canadá, 1982).

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