La policía política cubana ha iniciado una nueva oleada represiva desde horas tempranas de la mañana de hoy para impedir que activistas, opositores, periodistas independientes y Damas de Blanco y de Apoyo asistan a la iglesia Santa Rita en Miramar, luego del fallecimiento de Laura Pollán, líder de ese grupo femenino.

A nuestra agencia han llegado reportes de decenas de domicilios sitiados por la policía y agentes que impiden la salida a la calle.

Las líneas telefónicas de varios disidentes han sido interrumpidas para bloquear la comunicación.

El periodista independientes José Alberto Álvarez Bravo fue detenido al salir de su casa al igual que Katia Sonia Martín, Aimée Cabrales y otra Dama de Blanco.

Continúa sin conocerse el paradero de Sandra Guerra, Dama de Blanco, secuestrada por agentes de la Seguridad el sábado en la mañana cuando intentaba viajar desde su poblado Finca Ojos de Agua en el municipio Melena del Sur para asistir a los funerales de Laura Pollán.

Roberto de Jesús Guerra Pérez, del Centro Hablemos Press.

Llegan a Santa Rita cerca de 40 mujeres

A la iglesia de Santa Rita han podido llegar cerca de 40 mujeres, explicó la periodista independiente Magalys Norvis Otero, de la agencia Hablemos Press, quien se encuentra en estos momentos en el templo.

“Hay otras que no han podido llegar. Incluso hubo algunas que venían para acá con ramos de flores y fueron agredidas por agentes de la Seguridad del Estado, golpeadas, y les rompieron la ofrenda que nosotros humildemente traíamos para ofrecerle a Laura Pollán”, informó la activista.

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